Muchas personas, por falta de tiempo, recurrimos a entrenarnos de manera independiente, basándonos en libros o videos autoinstrucitivos y planteándonos nuestro propio sistema dietético.
Aunque no es lo más recomendable seguir un régimen de entrenamiento, sin el apoyo de un profesional, de todas formas es mejor seguirlo a no hacerlo. Para ello, debes considerar que el ejercicio suele influir de manera directa en nuestra alimentación.
A través de estudios realizados a personas que han decido ponerse en forma independientemente, se ha encontrado que los que entrenaban una media de 73 minutos a la semana adelgazaron 1,4 kilos, mientras que los que se ejercitaron en una media de 136 minutos, bajaron 1,8 kilos.
Lo sorprendente es que los que entrenaron 180 minutos a la semana como promedio, sólo perdieron 1,4 kilos, debido a que el exceso de actividad física les obligaba a comer más para compensar las energías perdidas.